Stranger things ha vuelto con mucha fuerza.

La gente ama o denosta esta serie. Sus detractores declaran que sustenta su éxito en la nostalgia ochentera. Aunque en parte es verdad, ¿qué tiene de malo? Nos devuelve una época que, sí, quizá sobrevaloramos, pero nos hace sonreír. Esa década en la que la tecnología accesible estaba en pañales y los niños todavía disfrutaban viviendo mil y una aventuras en un tablero de rol o en la calle. A mí me encanta la fiebre ochentera y noventera. 

¿Y los personajes? Tanto el elenco infantil como el adulto están de sobresaliente. Es imposible pensar en Stranger things y no destacar a Eleven/Once, esa carismática niña que ya se ha convertido en uno de los personajes más icónicos de la televisión y que emprende un viaje de autodescubrimiento en esta ocasión.

En esta secuela nos acompañan de nuevo Mike, Lucas, Will y Dustin. Este último adquiere relevancia en una subtrama que me ha encantado. Es un personaje que se hace querer. Recomiendo que veáis el documental Beyond Stranger Things (que lo ponen a continuación de la temporada y en 7 capítulos), el desparpajo y naturalidad de estos niños y sus entrevista os enamorarán.

Hopper ha sido mi personaje adulto favorito, evoluciona y nos muestra más cosas de su pasado y de sus sentimientos.

Me han encantado las alianzas y extrañas parejas de esta secuela. Son una de las cosas que más me han gustado. Cómo Steve se acerca a uno de los niños y se convierten en un inesperado equipo o la faceta familiar que vemos de Hopper, por no hablar de Dustin y su inesperado amiguito...

También hay nuevas caras, entre las que destaco la de Max, una chica dura que se incorpora a la pandilla.

Los adolescentes son una parte esencial del engranaje de esta segunda temporada. Nancy, Jonathan y Steve adquieren mayor importancia y tienen un papel determinante en la aventura.

Las referencias a la cultura pop son muchas, entre las que destaco: E.T., Star Wars, Los Cazafantasmas y Los Goonies.

Encuentra listados exhaustivos en:

• Fórmula TV.
• Vanity Fair.

El mundo del revés nunca fue tan oscuro ni estuvo tan cerca. En esta temporada, la realidad de nuestros héroes se ve contaminada por el Upside Down. Si creíaimos que no podía haber algo más malvado que el demogorgon... estábamos equivocados.

Podría seguir hablando durante horas de su magnífica ambientación, las interpretación de los actores y la acertada banda sonora, pero prefiero que descubráis los detalles por vosotros mismos.